La recta final del verano hace que justo antes de volver a la rutina nos planteemos nuevos retos y experiencias. Una de las más recurrentes es la que tiene que ver con la práctica deportiva. No se trata tanto de quitarnos kilos de encima o de estilizar nuestra figura, sino más bien de vivir nuevas y excitantes experiencias.
Dentro de esa colección de nuevos retos no son pocos los que se lanzan a la práctica del senderismo. Aire puro, caminatas y al final del día un envidiable estado de relax. Sin lugar a dudas el desarrollo de esta actividad es perfecto para quienes disfrutan en contacto con la naturaleza. Nuestro post de hoy tiene como objetivo ofrecer unas cuantas ideas a los principiantes –y tal vez a los que ya no lo son tanto- para disfrutar de una actividad senderista sostenible y responsable.
Antes de adentrarte a caminar en ningún paraje natural es muy importante que tengas en cuenta dos aspectos muy importantes:
Establecidas estas normas básicas para nuestra propia seguridad, es el momento de recoger toda una serie de recomendaciones esenciales en el respeto y la protección del medio ambiente. Porque nuestro disfrute de la naturaleza no tiene que implicar su destrucción y para ello conviene tener presente lo siguiente:
Por el momento estas pinceladas son de lo más adecuadas para iniciarte en la práctica del senderismo de forma respetuosa y sostenible. En próximos posts hablaremos de la vestimenta adecuada para la práctica de esta actividad, así como del material que nunca debe faltar en nuestra mochila.